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A veces olvidamos que la escuela está para formar personas, no sólo para impartir conocimientos. Y esto es aún más evidente cuando se trata de los más pequeños, donde el primero es casi más importante que el segundo. La importancia de las habilidades sociales en la educación infantil se ha hecho especialmente patente tras la pandemia del Covid19 y el duro confinamiento vivido en primavera. Luego, los niños de 0 a 6 años dejaron de interactuar entre ellos y todos se dieron cuenta de lo importantes que eran para su desarrollo. Así lo perciben sus allegados: padres y educadores.

Dado esto hemos querido prestar atención en este post a las habilidades sociales en educación infantil: qué son, cuáles se consideran las más importantes y cómo se pueden mejorar, según la perspectiva del educador, ya que es una de las principales. funciones de un educador de la primera infancia.

¿Qué son las habilidades sociales?

En general, las habilidades sociales son aquellas que capacitan a una persona para relacionarse adecuadamente con los demás, sin crear conflicto consigo mismo o con los demás. Se pueden clasificar según diferentes criterios, aunque solemos hablar de habilidades simples y complejas. El primero suele ser pequeños gestos como decir gracias o saludar. Pero en realidad, a menudo son indicadores de otras cosas más complejas que, en última instancia, quieren promover.

Las Habilidades Sociales Básicas en Educación Infantil

Las Habilidades Sociales en Educación Infantil y en cualquier otra etapa formativa son prácticamente las mismas, aunque se implementan de forma diferente por razones obvias. Se consideran las más importantes:

1. Empatía
La empatía es la capacidad de ponerse en el lugar del otro y es clave para muchas otras habilidades sociales.

2. Colaboración
Esta habilidad social incluirá otras más específicas, como el trabajo en equipo, compartir y asumir roles en beneficio mutuo, aceptar otros métodos de los compañeros, etc.

3. Afecto
También conocido como “apego”, implica crear un vínculo de confianza e intimidad con pares o adultos, en mayor o menor grado, según el caso.

. Comunicar
Hablar y escuchar son herramientas para adquirir otras habilidades sociales, pero su importancia radica en que también se consideran habilidades en sí mismas.

5. Autocontrol
Una de las cosas más difíciles de ser un niño, ya que se relaciona con la capacidad de manejar la frustración. Y este es uno de los grandes indicadores del nivel de madurez de un niño.

6. Autoafirmación
Esta es una de las cosas más complicadas, porque ni los adultos saben definirse. Al mismo tiempo, es una habilidad social muy importante en los niños debido a sus frecuentes interacciones. Puede verse a sí misma como su protectora pero no deja que otros se la lleven y siempre es respetuosa. Suele aplicarse a opiniones y opiniones más que a objetos y posesiones, y es fundamental para desarrollar la propia personalidad sin someter a los demás a la sumisión u ofensa.

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¿Cómo mejorar las habilidades sociales en los niños?

Debemos asumir que las habilidades sociales no son innatas. Es cierto que la personalidad de cada niño puede estar predispuesta, pero el desarrollo real de un niño dependerá de otros factores, como el ambiente del hogar o el trabajo del niño en la escuela principalmente.

En este sentido, hay muchas maneras de enseñar, animar y mejorar a los niños, y de hecho, en todas ellas los educadores juegan un papel fundamental, ya sea activo o pasivo.

1. Agrupación de la clase
La agrupación es una forma de fomentar el trabajo en equipo, especialmente a partir de los 3 años, cuando los niños dejan de jugar en paralelo y comienzan a interactuar de formas más complejas. Aquí, es fundamental que el educador explique claramente los objetivos de la tarea y los guíe en su implementación, excluyendo cualquier comportamiento competitivo entre ellos o con otros grupos

2. Establecer premios
Establecer premios también es una forma divertida de promover las habilidades sociales en la primera infancia, pero con recompensas que no son físicas sino tangibles. Por ejemplo, otorga una estrella cuando ganen una estrella. Al llegar a 10 estrellas, puedes entregar pulseras hechas a mano con materiales de aprendizaje. De esta forma, el niño se sentirá orgulloso de su comportamiento y reconocimiento, intentando seguir por este camino pero cayendo en la obsesión. Por el contrario, si después de realizar una habilidad social sin reconocimiento ni elogios, el niño no se sentirá motivado para repetir la conducta.

3. Ser ejemplo

aunque no es una técnica en sí misma, el educador nunca debe perder de vista que, a través del ejemplo, también imparte habilidades sociales… O viceversa, sobre todo porque representa un auténtico referente para los niños, un espejo para mirarnos.

Debes ser firme y asertivo al dirigir la clase, pero exagerar puede dar lugar a reprimendas, que pueden interpretarse como falta de autocontrol o falta de asertividad.

Conclusiones

No es fácil lograr el equilibrio perfecto, ni es fácil utilizar las técnicas adecuadas para potenciar las habilidades sociales en la educación infantil. Pero precisamente para averiguar todo esto, contamos con la Formación Profesional en Educación Infantil a distancia, donde tienes acceso también a realizar la parte práctica, ya que esta labor implica necesariamente el contacto directo con los niños.

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